lunes, 10 de enero de 2011

Acaban de confirmar mi ejecución.

Lo siento.. siento haberte hecho pedirme perdón por algo de lo que no eres culpable. Y siento esta entrada, porque estoy destrozada. Es como si hubiera oído al verdugo decir que iban a ejecutarme, y tú, juez, acabaras de confirmármelo. Siento pedirte que vuelvas otra vez, lo siento porque acabas de decirme que no puedes. Perdón pero estoy desesperada.. Es que estoy desgarrada por dentro. Y no me siento mejor si me pides perdón, ni si me dices que aún estás ahí para mí. Es como si tuviera sed y me dieras pan. Lo siento.. pero es que no sé cómo vivir sin ti. Perdóname pero es que me duelen las entrañas, es que no puedo llorar más. Que me escuecen las mejillas porque nunca se me secan del todo. Lo siento, de verdad, pero tengo que suplicarte que vuelvas. Porque voy a perder la cabeza en cualquier momento. De veras que siento hacerlo más difícil, pero te juro que esto es peor que estar muerta, es como estar muerta en vida. Solo que siento, siento además con el dolor multiplicado, siento heridas a flor de piel, siento que en cualquier momento me voy a desangrar porque tengo el corazón literalmente machacado, aplastado, triturado. Sólo puedo pensar en el dolor, te mentí, la biología no me distrae, ni ninguna otra cosa, todo me recuerda a ti, a que nunca volverás a abrazarme igual y me quiero morir... Nunca la desesperación me había tenazado la garganta de esta forma, una fuerza arrasadora está exprimiendo mis pulmones y ni una gota de aire queda en mí, sólo fuego, pero fuego del que quema, del que hace daño y te deja en carne viva, y está ardiendo desde dentro. Me estoy muriendo poco a poco por necesidad. Porque sólo pensar que nunca va a volver a ser igual se me rompen las costillas y se me clavan y desgarran mi pecho, y todo lo que hay en mí no es más que un amasijo de piel y huesos muertos, pero siento el dolor en toda su intensidad. Por favor, te lo suplico, haz lo que esté en tus manos, por favor, vuelve, vuelve porque creo que me estoy volviendo loca, este dolor va a acabar conmigo, con mi esencia, con mi vida, con mi alma y ojalá pudiera quedarme ahora inconsciente. Si no vas a volver, dime cómo no sentir, dime cómo no matarme lenta y dolorosamente con un jamás.. Siento tener que suplicarte que vuelvas y me protejas, y cuides de mí. Siento ser tan débil. Pero no te miento, el dolor me está haciendo enloquecer.. Tú me abandonarás sin hacer ruido, mientras mi corazón salpica y juega sin darse cuenta de que ya te has ido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario